miércoles, 5 de diciembre de 2007

Al otro lado del espejo

Estaba al borde del abismo...yo misma me empujé. El incontenible deseo de mostrar a todos quién soy verdaderamente me hizo llegar hasta allí. Quería hacerles ver que nunca me rendiré ante nada para conseguir lo que deseo. Ambición, quizás. Mirarles y que sin pronunciar una palabra, entiendan que fracasaron. Hablarles, haciéndoles tragar sus argumentos augurando mi futuro. Sonreírles, pues no hay mayor derrota para ellos que mi felicidad. Felicidad, vuelvo a repetir, porque conseguí atravesar la línea que me separaba del exterior, que me impedía sacar a mi verdadero "yo" y mostrarme tal y como soy. Mi frialdad, absurda consecuencia de mis nervios causados por un estúpido temor que hicieron crecer en mí. Ahora me siento libre, ya no tengo miedo. Di un paso, me lancé al vacío y descubrí que lo que había allí me gustaba...así que... me quedaré para siempre.

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